El reto que tenemos frente al migrante

Buenas Noches.

Envío con la primera luz del día mi Buenas Noches, con el deseo de que nuestro día esté impregnado por la oración.

Considero, que en vez de ir amainado, se va agudizando cuanto se refiere al fenómeno, casi universal, de la MIGRACIÖN, cuestión urgente de nuestro tiempo, tanto de nuestro continente americano como del continente europeo, asunto al que no se le encuentra una solución adecuada.

Me llegaron esta mañana noticias muy tristes en el campo de la migración, procedentes de Panamá, donde, el pasado día 17, un camión colmado de migrantes, que el gobierno panameño había dispuesto para su traslado a la frontera de Costa Rica, procedentes de Suramérica,, rumbo a los Estados Unidos de Norteamérica, por exceso de velocidad, volcó con el aciago resultado de 40 personas fallecidas y 20 heridos, entre adulos, jóvenes, niñas y niños de un total de 60, que iban en el vehículo.

Dichos migrantes procedían de Ecuador, Venezuela, Cuba no faltando algunos de China. Todos ellos habían logrado atravesar la selva virgen del Darién, colmada de peligros, intransitable, pero que, la migración urgida por la necesidad vital, la ha hecho transitable a pesar de sus zonas pantanosas, calores inhóspitos, fieras salvajes, ríos caudalosos…, que, la escasez, el hambre, la pobreza la han abierto a los emigrantes.

Otra noticia sobre este mismo tema de la migración ha sido la declaración del obispado de México, convocando a los creyentes, sin importar credo o religión, a vivir el día de hoy, domingo 19 de febrero, en Jornada de Oración, en pro de la dignidad de los migrantes, dado los peligros y los abusos que se comenten contra ellos en su paso por el país. Destaca el episcopado, que en estos dos últimos meses, se han cometido contra ellos 13 480 delitos: muertes, asesinatos, secuestros, violaciones extorsión…, que en general quedan impunes, fruto de bandas criminales organizadas y de personas sin conciencia.

Las causas de esta migración incontrolada son la inseguridad, la persecución política, la enfermedad, la falta de un trabajo digno, la pobreza, la miseria, la extorsión, etc. que sufren los pueblos, para las que no encuentran solución en sus países de procedencia. El episcopado hace una llamada el día de hoy a todo hombre y mujer de corazón compasivo, a apoyar con la oración, el amor, los recursos que tengan a mano y el servicio humilde al migrante necesitado.

Dije el amor, el amor que busca el bien del otro, que surge de lo más profundo del ser humano, que es su condición de semejanza con Dios, como se lee en libro del Génesis: “Y creó Dios al hombre a su imagen. A imagen de Dios lo creó, hombre y mujer los creó” (Ge. 1, 27). El migrante, hombre, mujer, joven, niña o niño, anciano o anciana, es obra de Dios y Dios está en él.

Encontré unas palabras muy precisas del escritor, J- A. Pagola, respecto al amor, que no deseo guardarlas para mí y las comparto con agrado: “Amar al prójimo exige hacerle el bien, pero significa también aceptarlo, respetarlo, valorar lo que hay en él de amable, hacerle sentir nuestra acogida y nuestro amor. La caridad cristiana induce a la persona a adoptar una actitud cordial de simpatía, solicitud y afecto, superando posturas de antipatía, indiferencia o rechazo”.

Este mismo autor al hablar del amor al otro, insiste en cultivar la cordialidad, que es “el lenguaje de la vida”, actitud afectuosa, afabilidad que quiebra el gesto adusto, frío, distante; implica franqueza y sinceridad. Es el amor cristiano el que promueve la cordialidad y “se opone directamente a nuestra tendencia a dominar, manipular”, presumir sobresalir, en una palabra al orgullo, al “ego” dominante y prepotente.

En este momento en que escribo mi Buenas Noches, despierta en mi mente la expresión con que Jesús concluye la parábola del Buen Samaritano, dirigida al orgulloso maestro de la Ley, que le ha preguntado, ¿quién es mi prójimo?: “Ve, y haz tu lo mismo” (Lc 10,37). Este es el reto que tenemos con relación al migrante-

Fray Pablo o.p. 19 de febrero 2023.